GRUPO MUNICIPAL DE IULV-CA.
AYUNTAMIENTO DE ÚBEDA.-
Diego de la Cruz Martínez López,
Portavoz del Grupo Municipal de Izquierda Unida Los Verdes-Convocatoria por
Andalucía (IU LV-CA) de este Ayto., al amparo de lo establecido en el art. 91.4
y 97.3 del vigente Reglamento de Organización, Funcionamiento y Régimen Jurídico
de las Entidades Locales y del 45.3 del Rofau, somete a la consideración del
Pleno de la
Corporación Municipal, para su debate y aprobación, si
procede, la siguiente MOCIÓN
POR UN “PER ESPECIAL” Y LA ELIMINACIÓN DEL REQUISITO DE PEONADAS PARA
ACCEDER AL SUBSIDIO AGRARIO
Exposición
de Motivos.-
Las adversas condiciones climatológicas que se han dado en los últimos meses,
con numerosas heladas, ausencia de lluvias y altas temperaturas han provocado
que se confirmen los peores augurios para el olivar y otros cultivos, generando
una situación que puede ser alarmante en los próximos meses en una provincia,
como la nuestra, con una alta dependencia del monocultivo del olivar. Tanto las
cooperativas como las organizaciones agrarias coinciden en que la próxima
campaña oleícola sufrirá una drástica reducción de la producción, que se puede
situar por encima del 70%. El escenario se agudizará, ya que muchos olivareros
no realizarán la recogida de aceituna de su explotación por la baja producción
y, por tanto, nula rentabilidad. Así, la provincia de Jaén y el campo andaluz
en general se encontrarán ante un grave problema social derivado de una merma
muy importante en la campaña oleícola por la reducción en la misma proporción
del número de jornales en la campaña de recogida de la aceituna, en un sector
del que dependen el 90% de los municipios de la provincia de Jaén.
Las
pésimas previsiones para la próxima campaña contrastan con los últimos datos de
desempleo, con un aumento de 33.300 personas paradas en Andalucía durante el
segundo trimestre de 2012, lo que supone un crecimiento del 2,5% con respecto
al primer trimestre de este año. El número total de desempleados-as en
Andalucía ha alcanzado ya la cifra de 1.362.900 personas, lo que sitúa la tasa
de paro en el 33,92% según los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) hechos
públicos por el Instituto Nacional de Estadística.
Jaén
ha sido la provincia andaluza con mayor tasa de desempleo en el segundo
trimestre de 2012, con un 37,18%. En cuanto a tasa de actividad, también se
encuentra en el último puesto con un 53,55%.
Por otra parte, el popularmente
denominado “Plan de Empleo Rural” ha
jugado un importante papel en las zonas rurales, las cuales tradicionalmente
habían estado sometidas al abandono y la marginación, relegándolas a la
consideración de territorios en los que albergar un ejército de mano de obra de
reserva para su utilización durante la campaña agrícola y en aquellos procesos
productivos que pudieran ponerse en marcha en las grandes ciudades y en otros
territorios del Estado. El PER, que afecta a Andalucía y Extremadura, suponía
el desarrollo de tres líneas de intervención: Formación, empleo y protección
social. Este Plan ha sido la base sobre la que se ha apoyado la transformación
social de las zonas rurales de nuestro territorio. Sin embargo, ha sido
denostado hasta la saciedad, y aún hoy sigue siéndolo, precisamente por
aquellos que justificaban y reforzaban las estrategias de abandono y
marginación. Sin embargo, el PER permitió que nuestros pueblos fueran
adquiriendo unas infraestructuras y dotaciones, de las que hasta entonces
carecían, lo que les alejaba aún más del contexto estatal en términos de
modernidad.
La implementación del PER en los
municipios rurales permitió, en primer lugar, que el conjunto de la población
jornalera pudiera tener acceso a un sistema de protección, en forma de Subsidio
Agrario, que se le había negado de manera sistemática hasta ese momento. El
acceso al Subsidio Agrario supuso la posibilidad de que cada persona jornalera
adquiriera dignidad como trabajadora y pudiera garantizar unos ingresos básicos
para el sostenimiento de su familia. Por otro lado, el PER ha permitido a los
trabajadores agrarios que pudieran complementar la renta familiar con la
realización de trabajos fuera del campo, cuando las faenas agrícolas decaían o
el trabajo en el campo no existía, mediante programas de obras públicas
desarrollados desde los ayuntamientos andaluces que permitían ofrecer a los
trabajadores agrarios unas rentas complementarias para ayudar a cubrir las
necesidades, a la vez que facilita la práctica laboral en nuevas profesiones
que permiten completar así la formación laboral recibida.
El actual Programa de Fomento del
Empleo Agrario (PFEA) es un instrumento que, a través de subvenciones a los
ayuntamientos, permite realizar inversiones en el mundo rural y contribuye a
fijar en éste a la población. Fue establecido en 1986, con el nombre de Plan de
Empleo Rural y en sustitución del llamado “empleo
comunitario”. El PER estaba destinado a las comunidades de Andalucía y
Extremadura para que contratasen a trabajadores eventuales agrarios jornaleros
en paro y facilitar así un período de empleo y el acceso a un subsidio especial
de desempleo.
Hay que distinguir entre el Programa
de Fomento de Empleo Agrario (antes PER) y el subsidio por desempleo para los
jornaleros. El primero existe también en Castilla-La Mancha, Murcia y Valencia.
El segundo no. El “PER” consiste en
que el Estado destina un fondo anual (en Andalucía, 142,9 millones de este año,
más 4,7 millones que aporta la
Junta de Andalucía) para que los ayuntamientos realicen obras
y contraten a jornaleros en paro. El dinero va a los consistorios, que presentan
sus proyectos de obras a los directores provinciales de Empleo (dependientes
del Ministerio) para que los aprueben. A priori, reciben el 70% y el resto al
acabar las obras y justificar los contratos hechos. Si no, deben devolver el
dinero. A andaluces y extremeños esos contratos les sirven para completar las
peonadas que necesitan para cobrar el subsidio. En 1986 se creó un subsidio para la población rural andaluza
y extremeña que reúnan 35 peonadas al año y con un tope de renta anual. En
Andalucía este subsidio lo cobran unas 250.000 personas de las 470.000
inscritas y ronda entre los 426 y los 569 euros mensuales.
Hoy, más que nunca, el Plan de
Empleo Rural (PFEA) resulta básico e imprescindible para nuestras zonas
rurales, siendo necesario adoptar algunas medidas particulares que refuercen la
capacidad protectora y de garantía de rentas que dicho plan tiene.
Por
todo lo expuesto, quien suscribe en nombre del Grupo Municipal de IU LV-CA
propone al Pleno de la
Corporación Municipal la adopción de los siguientes
ACUERDOS
1º.- El Pleno de este
Ayuntamiento insta al Gobierno de la
Nación y al Gobierno andaluz a poner en marcha, con carácter
de urgencia, un Programa de Fomento del Empleo Agrario Especial, con fondos
extraordinarios, para ayudar al mundo rural a superar la terrible crisis
económica y la falta de actividad agrícola por la que estamos atravesando.
2º.- El Pleno
de este Ayuntamiento propone al Gobierno de la Nación y al de la Junta de Andalucía que
continúen apoyando y desarrollando el Programa de Fomento del Empleo Agrario,
con una mayor dotación económica.
3º.- El Pleno
de este Ayuntamiento insta al Gobierno de la Nación a que elimine el requisito de tener un
número de peonadas para tener acceso al Subsidio Agrario con efectos desde el
año 2012 hasta el año 2014.
4º.- El Pleno
de este Ayuntamiento insta a los gobiernos central y autonómico a que
desarrollen programas de formación profesional en las zonas rurales para
mejorar la capacidad laboral y profesional en el medio rural andaluz.
En Úbeda, a 20 de septiembre de
2012
Fdo.: Diego de la Cruz Martínez López
Portavoz del Grupo
Municipal de IU LV-CA.